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domingo, 29 de noviembre de 2009

Being for the Benefit of Mr. Kite




Mi novia me esperó con el vestido puesto, y yo no estaba. Había ido a comprar cigarrillos. Cuando volví, tumbada sobre el sillón como la maja vestida, murmuró que me había extrañado, que no le había contestado los mensajes y que quería una pitada. Dijo que la pasó bien en el casamiento de su amiga, y que escuchó Here comes the Sun y se acordó de mí.
Ese tema le gusta mucho a ella, al igual que a mí, y otro con el que tenemos una suerte de código interno es All you need is love. Ambos sonaron en la fiesta. Yo la acompañé a la cama, la besé varias veces, y antes que se durmiera puse play a las dos canciones; ella fue feliz antes del desmayo y yo volví al living a destapar una cerveza ya abierta y poner más música.
Un velo nostágico que quedó en el aire y la recurrencia a Liverpool decidió inexorablemente que era el turno de Free as a bird. El insomnio volvió otra vez y arrancó una lista de The BEatles. Y, mientras suena el album blanco y los párpados siguen en su lugar, se me ocurrió volver al blog con una película fácil de describir y que viene al cuento de los minutos anteriores.

Across the Universe es un musical dramático sobre la guerra y los amores perdidos sustentado, descaradamente, en la discografía de la banda con más influencia de la historia de esta era - se me ocurre decir que es la definitiva, la absoluta, pero rememoro que con Pink Floyd no se jode.
Se ve que a unos tipos le pareció negocio arrojarnos una historia de amor, parte Titanic parte Crepúsculo, con el as en la manga que representa varios de los mejores temas de Beatles, esperando que el vómito atragantado ante tanta insipidez se disuelva con un Hey Jude que actúe como Alikal.
Jude!, un chico pobre de Inglaterra, cruza el océano a buscar al padre que nunca conoció. Cuando llega a "los Estados", lo va a buscar a la universidad donde trabaja, lo encuentra, se dicen un par de cosas livianitas como los productos que recomienda Pancho Ibáñez, y eso es todo. El padre actúa así: - Ah sí, flaco, soy tu padre. Te estuve esperando, lloré mucho estos años. Los forros vienen pinchados, qué se le va a ser. Tu vieja bien? A mí me gusta mucho el pescado y las sonatas de Liszt. Te invito una birra cuando quieras, andá a recorrer que hay gente copada por acá eh! Cuidate.
Jude obedece. Buscando algún liberal que sea católico ortodoxo por el Bronx conoce a su amigo Max ( si es por silver hammer, aplaudo porque es infumable), que tras varias pavadas a lo Bay, le presenta al amor de su vida: Lucy.
Lucy es una rubia neurótica que se enamora de Jude, obviamente. El temita es que a Max le toca la guerra, como buen patriota, y tiene que ir a morir por la gloria americana.Un gil que fuma faso y quiere tocar la guitarra tiene que ir a matar chinos para que su tumba diga que fue un héroe. La guerra tiene esas cosas, qué se le va a hacer. Lucy encabeza una "revolución" contra la guerra, a lo Lennon ( perdónalos, John, no saben lo que hacen) y a Jude le pinta la rebelión, lo arrestan y lo deportan.

¿Que pasó en el medio? Don guionista armó un yenga entre Michael Fox y Muhammad Ali. Cada pieza caída es una idea. Por ej: ya que los protagonistas portan semejantes nombres, también tenía que haber una Sadie, una Prudence y un par de temitas que los introduzca. Si Sadie está indispuesta, ahí arranca "Dr Robert" con porristas y flor de coreografía. El ginecólogo evalúa y los bailarines empiezan a cantar "Dig it". Así va la película. Obviamente, llega el momento lisérgico cuando todos se suben a un bondi y cantan I am the Walrus. ¿ Adivinen quién aparece? Bono. Posta, el señor de la ecología de alta gama hace su aparición para ponerle color y flashes a un film sin rumbo. Todo es así.
Pero como el amor es más fuerte, a Jude no le alcanza con ponerla en Inglaterra, vuelve a USA a buscar a Lucy. Se encuentra con un Max pirado post-Vietnam, pero como Jude es un crack, se recupera al verlo. Le dice que vaya a buscar a Lucy, que ha permanecido en celibato por él. Allí está ella, apoyando a la banda de Sadie, que canta contra la guerra. La policía se los lleva a todos presos. Pero Clark Jude se las ingenia para subir a la terraza donde tocaban los pibes y canta All you need is love a los cuatro vientos. Lucy lo escucha y renace el amor.

Dios, cómo me costó sacarme de encima este último párrafo.Una porción exquisita de la discografía de estos genios salió a flote con un par de excusas baratas. Créanme que la lista es bastante buena. Y ojo: los muchachos en cuestión cantan muy bien, la dirección hizo todo su esfuerzo. Pero no se cae una idea. Cada tema que viene no tiene una puta razón de ser, están agarrados de las pelotas para beneficio de Mr Kite.
Si te gustan las historias de amor pedorras, ok. Si el fanatismo hacia Beatles te lo permite, adelante. Yo no se la recomiendo a nadie.Si bien algunas tomas salen bien, y Evan Rachel Wood y el gamberro Jim Sturgess ponen todo su esfuerzo, no hay mucho para disfrutar. Hay más para retorcerse. Si aún así siguen adelante, piénsenlo: Happiness is a warm gun.

ACROSS THE UNIVERSE. 2007

VALORACIÓN: 5

DIRECCIÓN: Julie Taymor
GUIÓN: Dick Clement - Ian La Frenais
PRODUCCIÓN: Matthew Gross - Jennifer Todd - Suzanne Todd
FOTOGRAFÍA: Bruno Delbonnel
EDICIÓN: Françoise Bonnot
MÚSICA: Elliot Goldenthal - Soundtrack

REPARTO: Jim Sturgess - Evan Rachel Wood - Joe Anderson


DURACIÓN: 133 M
PAÍS:  USA
LENGUAJE: INGLÉS
ASPECTO: 2.35 :1
CALIFICACIÓN: AM 13
CRÍTICA:
"Me gustó ese tema que dice turu ni nu ni nu ni. Muy alegre. Lindo"  Jorge Formento, albañil
"Provocativo y nefasto para los chicos. Apología de drogas, sexo inseguro y salidas de noche. El rock estupidiza" Abel Posse, Ministro de Educación
"Un flaaaash" Mirta Busnelli, adicta
"Lindo, qué se yo. Bah, no sé. No entendí mucho" María Laura Santillán, demagoga

viernes, 25 de septiembre de 2009

The packed list



La única razón por la que vi esta película es para saciar la curiosidad: a ver qué hicieron dos tipos talentosos  que raramente (o nunca) han trabajado juntos. La misma por la que vi Righteous Kill, que trajo a Pacino y De Niro juntos después de 13 años, pero en contacto permanente; recordemos que en The Godfather II son atemporales y en Heat tienen un breve (aunque genial) cruce.

Righteous Kill es horrible, ho-rri-ble.

The Bucket List no me decepcionó, pero porque no esperaba nada. Comedia simpática con diálogo empaquetado, situaciones graciosas y esfuerzo feroz por emocionarnos.Zzzzzzzzzzzzzz....
Lo diluida que puede resultar una  escena, es reflotada con maestría por los dotes de Jack Nicholson y el apoyo carismático de Morgan Freeman, de quien me pregunto con frecuencia si es o no un buen actor.Es decir, bueno es, pero ¿qué tan bueno? Desde Miss Daisy que cuesta horrores arrancarlo completamente de su anterior personaje; con cuotas de recio, prudente y capo, da la sensación de que siempre coquetea con Morgan Freeman y nadie más. La apuesta más efectiva, creo yo, fue en Bruce Almighty cuando la producción decidió que era un tipo tan sabio en cada film, que le dieron el rol de Dios.

De la historia no hay mucho para explayarse: dos ancianos doloridos que se conocen en un hospital: Jack es el dueño del establecimiento, Morgan es mecánico y va a parar a la cama contigua ( Fórmula 1: clases opuestas; Fórmula 2: encuentro casual).Como uno intuye que alguno de los dos,o ambos,va a morir - para que la película no sea un fiasco abominable- Jack dice: -Hey man, too much worry...Vamos de viaje por el mundo a disfrutar lo que nos queda!! ( ¿Fórmula? 3: giro alocado que responde qué carajo va a pasar entre ellos si están postrados a pura morfina).El hilo va pendiendo en sus roces inocentones y situaciones desopilantemente predecibles, con el punto fuerte de las típicas pero siempre efectivas reacciones cascarrabias de Jack, pichón de Clint Eastwood en Gran Torino.

El final, sin develarlo, apuesta al llanto, asumiendo que si el espectador promedio se cansó de reirse, le quedará un espacio para algunas lágrimas.Plaf plaf plaf a la industria: tienen todo bajo control.De profundidad, ni hablar. Más fructuoso ir de pesca al arroyo del Gato.Y así pasa hora y media, preguntándonos qué se está tejiendo en Hollywood, si nos traerán a Edward Norton y Kevin Spacey como rivales en un club de golf o seguirán empeñándose en hacer de Mark Walhberg una estrella. Mientras vemos que Mr Nicholson, que bien usa la mayor parte de su tiempo en ver a los Lakers, trabaja espaciado y en cosas intrascendentes, quizás sólo para divertirse él mismo. Mr Freeman sigue la senda del buen hombre, terco pero sabio, y premiado.Lo que la industria yankee nos brinda, en el mejor de los casos y salvo raras excepciones, es un rato ameno para apagar el stress, ideal para descontracturarse.No crean que Bucket List es una mala película, es solamente una que ye vimos incontables veces.

Fórmula.

THE BUCKET LIST. 2007

VALORACIÓN: 5.5

DIRECCIÓN: Rob Reiner
GUIÓN: Justin Zackham
PRODUCCIÓN: Alan Greisman - Neil Meron - Rob Reiner - Craig Zadan
FOTOGRAFÍA: John Schwartzman
EDICIÓN: Robert Leighton
MÚSICA: Marc Shaiman

REPARTO: Jack Nicholson - Morgan Freeman - Sean Hayes

DURACIÓN: 97 M
PAÍS: USA
LENGUAJE: INGLÉS
ASPECTO: 1:85 :1
CALIFICACIÓN: AM 13

CRÍTICA:
"Sensible, graciosa y audaz. Una caricia al alma", Huberto Roviralta, vivo
"Para reir y emocionarse.Brillante" Puma Goity, maestro en corte y confección
"Me cagué de risa, lástima ese negrito" González Oro, ese amigo del hampa
"Genial química entre ambos, la mejor comedia del año" Carlos Turrone, defensor del INDEC